Las intervenciones artísticas o creativas son acciones que implican a personas, prácticas o productos del mundo del arte que entran en el mundo de las organizaciones (no artísticas). En los últimos años, se han convertido en una interesante táctica que apoya nuevas formas de ver y hacer las cosas en las organizaciones, independientemente de su perfil. También conocidas como iniciativas basadas en el arte, las intervenciones creativas "traen personas, procesos y productos del mundo del arte al lugar de trabajo" (Berthoin Antal 2009).
¿Qué son las intervenciones creativas?
"Una intervención artística es una interacción con una obra de arte, un público o un lugar/espacio previamente existentes. Tiene el carácter de arte conceptual y suele ser una forma de performance. También puede referirse a una forma de arte que entra en una situación fuera del mundo del arte en un intento de cambiar las condiciones existentes allí. Por ejemplo, el arte de intervención puede intentar cambiar situaciones económicas o políticas o puede intentar concienciar a la gente de una condición de la que antes no tenían conocimiento. "
Los orígenes y la "mecánica" de las intervenciones artísticas
La popularidad de las intervenciones artísticas surgió en la década de 1960, cuando los artistas intentaron transformar radicalmente el papel del artista en la sociedad, y con ello la propia sociedad. Se asocian más comúnmente con el arte conceptual y el arte de la performance, y el término intervención expresa claramente la idea de "interrumpir o romper la continuidad". En los últimos años, los empresarios han introducido intervenciones creativas para apoyar el cambio, reforzar la creatividad y la capacidad de innovación, mejorar las condiciones de trabajo y aumentar las competencias de los profesionales.
En otras palabras, podemos afirmar que las intervenciones creativas (o artísticas) se producen cuando las personas, los productos o los servicios del mundo de las artes "se encuentran" con organizaciones que trabajan en temas no culturales/artísticos para promover la innovación, implementar, mejorar o buscar soluciones y oportunidades dentro de los procesos de trabajo, promover la innovación y fomentar los valores de la organización.
Está claro que las intervenciones creativas representan medios innovadores para responder eficazmente a retos importantes como la pandemia de Covid-19, debido a su alto potencial para estimular experiencias de aprendizaje y cambios productivos, así como para desarrollar las capacidades operativas y dinámicas de las organizaciones no artísticas.
Es importante señalar que la tendencia también está impulsada por el interés de los artistas, que están descubriendo las organizaciones como un lugar para su propia producción creativa, así como una oportunidad para influir en la sociedad y ganarse la vida.
En toda Europa se está desarrollando un número creciente de intervenciones artísticas y el aprendizaje basado en las artes ha surgido como una nueva pedagogía en la enseñanza de la gestión como consecuencia de la amplia evolución económica y social.
¿Cuál es el impacto de estas intervenciones en los artistas?
Hasta ahora, la investigación sugiere que las intervenciones artísticas tienen un impacto en los artistas en términos de beneficios financieros y artísticos, mejora de las habilidades artísticas y un impulso de inspiración a través de un desafío mutuo. También tienen un impacto significativo en las organizaciones que estimulan el desarrollo de habilidades técnicas, potencian la creatividad, la motivación, la comunicación, la creación de equipos y la imagen de su marca.
La "confrontación" entre las diferentes perspectivas, comportamientos y valores de estos dos "universos", el Universo de los Artistas y Creativos y el Universo de las Organizaciones/Empleadores no creativos, puede generar bienestar, innovación y nuevas perspectivas al desafiar los supuestos subyacentes y las rutinas irritantes de una cultura organizativa, abriendo así espacios de posibilidad.
Estimular a los empleadores y a su personal para que se comprometan con las artes en su lugar de trabajo puede considerarse un potencial desencadenante para todos, ya que los artistas, los empleadores y el personal de las organizaciones pueden explorar conjuntamente ideas innovadoras y emprender vías experimentales para crear nuevas prácticas que no residan en ninguno de estos grupos, por sí solos.
Un artista o profesional creativo aporta un factor X a los procesos establecidos en una empresa, la creación de equipos, la generación de ideas, la formación en comunicación, el desarrollo de productos y los procesos organizativos que apoyan la innovación.
Como se describe en el artículo Art works: how art in the office boosts staff productivity - Un espacio de trabajo creativo y luminoso puede hacer que los empleados sean más productivos, reducir el estrés y aumentar el bienestar, hay muchos ejemplos de cómo una intervención creativa puede impulsar la productividad, reducir el estrés y aumentar el bienestar.
Para tener éxito, las organizaciones deben invertir en innovación creativa, competencias culturales, conocimientos emocionales y colaboración, así como en el bienestar y la mejora de las habilidades de la mano de obra formada. Las competencias artísticas y culturales tienen un papel importante a la hora de afrontar estos retos.
Las posibles funciones de los artistas en las intervenciones creativas son:
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eliminar los bloqueos y allanar el camino hacia las discusiones constructivas
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ofrecer inspiración
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organizar la contradicción, la confrontación y la fricción
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crear aperturas al decir lo indecible
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sacar a la gente de su zona de confort
Necesidades de los líderes de las empresas que las intervenciones creativas pueden satisfacer:
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estar abierto a asumir riesgos
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tener objetivos, pero no tener rutas fijas para alcanzarlos
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creer que la confianza es su suposición básica, también con la creencia de que asumir riesgos producirá buenos resultados.
Las intervenciones artísticas pueden crear un campo de experimentación que responda a una doble necesidad:
Tu necesidad como creativo/artista
De hecho, las artes necesitan nuevos espacios para contribuir a la transformación social ofreciendo creatividad y reflexión, transgresión positiva y perturbación proactiva, más allá de la función decorativa y estética, lejos de ideas preconcebidas que no siempre son reales. Así, organizaciones de otros sectores se han convertido en potenciales socios de aprendizaje de las artes.
Las necesidades de las organizaciones/empleadores no creativos
Los empleados y directivos de organizaciones de todo tipo se enfrentan al reto de transformar los productos y servicios en experiencias memorables, en respuesta a la necesidad de sentir y experimentar en lugar de poseer y acumular, lo que está creando una auténtica revolución.
El arte puede satisfacer su necesidad de comprender y responder a demandas más elevadas y diferenciadas de los ciudadanos, a nuevas necesidades sociales, o a viejas necesidades encarnadas en diferentes demandas y en diferentes marcos.
Te guiaremos a través de un camino virtual pero realista que te permitirá dar los pasos correctos y dejar tus huellas para construir tus propias intervenciones creativas y exitosas contribuyendo al bienestar personal y de tus organizaciones no creativas.
